CARACTERÍSTICAS DE LA COMUNICACIÓN
ORAL
La comunicación oral se caracteriza por ser bilateral, puesto que
en ella intervienen, sucesivamente, los diferentes interlocutores. Se establece
a través de un canal auditivo, en el que son fundamentales, además del empleo
del lenguaje no verbal, elementos como el timbre de voz,
la entonación, y la intensidad con que se pronuncian ciertas sílabas o palabras
y que sirven para determinar su significado.
Dentro de las características principales de la Comunicación Oral
encontré varias citas de autores que plantean sus puntos de vista acerca de la
oralidad:
González Castro V. (1989: 272) plantea que es un proceso de interacción
social a través de símbolos de sistemas de mensajes que producen como parte de
la actividad humana. También puede entenderse como intercambio, diálogo, vida
en sociedad, todo ello relacionado indisolublemente con las necesidades
productivas de los hombres y no puede existir sin el lenguaje.
Báxter Pérez E. (1999) la define como el proceso por medio del cual el
hombre, utilizando palabras, gestos y símbolos, intercambian una información o
idea; o como la actividad consciente que se establece cuando dos o más personas
se interrelacionan, con un motivo definido mediante el lenguaje (bien sea oral
o escrito). Se coincide con el planteamiento de que cualquier definición de
comunicación comprende los elementos básicos comunes siguientes:
• EL sujeto que emite el mensaje (emisor).
• El contenido del mensaje.
• Las vías y los medios que se utilizan para transmitir el mensaje.
• El sujeto que recibe el mensaje (perceptor).
González Rey F.(1985) dice que la comunicación es un proceso esencial de
toda la actividad humana, ya que se basa en la calidad de los sistemas
interactivos en que el sujeto se desempeña, y además tiene un papel fundamental
en la atmósfera psicológica de todo grupo humano.
Ortiz Torres E. (1995) comparte los criterios dados por González F., del
carácter teórico metodológico de la relación entre la personalidad y la
comunicación, ya que el hombre se implica como personalidad en el proceso
educativo, la personalidad debe ser estudiada a partir de los contextos
comunicativos. Solo a través de la comunicación las personas se expresan y
descubren sus irregularidades esenciales; el hombre como personalidad es el sujeto
del proceso comunicativo.
Para B.F Lomov (1989: 293) la comunicación es la interacción de las
personas que entran en ella como sujetos, que no sólo se trata del influjo de
un sujeto con otro, aunque esto no se excluye, sino de la interrelación entre
ambos. En ella se lleva a cabo un intercambio de actividades, representaciones,
ideas, orientaciones, intereses, etcétera, se desarrolla y manifiesta el
sistema de relaciones sujeto-objeto, necesitándose como mínimo para su
realización, dos personas, cada una de las cuales actúa como sujeto.
Este autor la considera una categoría muy relacionada con la categoría
actividad y propone los siguientes principios:
1- La comunicación no se reduce al lenguaje verbal porque todo el
organismo es instrumento de ella.
2- No se restringe a la transmisión de información, no solo se propaga
sino se crea dentro del propio proceso comunicativo.
3- En la comunicación se resuelve la contradicción entre lo particular y
lo general de los hombres, entre sus cualidades generales y particulares.
4- El hombre se realiza y asimila en la comunicación su esencia general.
Para Mañalich Suárez R. (1999), la comunicación es un proceso complejo
relacionado con el comportamiento humano.
Otros autores como Maldonado A., Sebastián M.E. y Soto. (1999),
consideran que la comunicación es un proceso donde un sistema trasmite
información a otro sistema que es capaz de recibirla.
Entre las formas más naturales de la oralidad está la conversación, que
se tiene también como una forma de comunicación no elaborada.
La formulareidad es una de las características más interesantes para
quien estudia la función poética o textual del lenguaje. Se trata de la
recurrencia de fórmulas o grupos de palabras empleadas regularmente en las
mismas condiciones métricas para expresar una idea esencial dada (Parry
1971:272, citado en Ong 1987:32) que le confiere a la oralidad un carácter más
bien circular.
En la oralidad la no planificación se da en la mayoría de los casos, por
ser una comunicación espontánea, como por ejemplo una conversación informal
entre dos amigos.
Para Halliday, la lengua oral no es menos estructurada ni menos
organizada que la escrita. Así llega a afirmar: "Contrariamente a lo que
piensa mucha gente, la lengua hablada es en su totalidad, más compleja que la
lengua escrita en su gramática y la conversación informal y espontánea es,
gramaticalmente, la más compleja de todas (Halliday, 1985:47, mi traducción).
Sin embargo, las razones de esa complejidad son diferentes. Transcribir una
conversación oral en un texto escrito requiere de orden y estructura porque no
todo lo que se dice y como se dice puede transcribirse exactamente, porque por
ejemplo las pausas no son necesariamente equivalentes a puntos aparte dentro de
un texto. Por esta razón se debe tener cuidado especial al transcribir una
conversación o entrevista, para que no se pierda el sentido y el significado de
la misma.